FUNDAMENTOS


9/6/15

9/6 Dr. JOSÉ LUÍS SERRERA CONTRERAS


Esta tarde en el Centro de los Ejércitos nos ha visitado nuevamente el Doctor José Luís Serrera Contreras, Vicepresidente de la Real Academia de Medicina, y como siempre nos ha impartido una conferencia muy interesante, en esta ocasión bajo el título de “Híspalis, la Sevilla oculta”, en la que nos ha desvelado los subterráneos existentes bajo nuestras calles y mas concretamente el que existe bajo la calle Abades, referencia obligada para la arqueología sevillana. Durante mucho tiempo se creía que era una construcción musulmana, incluso Argote de Molina en el siglo XVI decía que estos subterráneos se debían a la magia mora, pero recientes estudios los data en la época romana, ya que el material empleado era proveniente de Itálica, además de una moneda encontrada in situ con la efigie de Adriano, por lo que se estima que sería del siglo II. Al abrigo de este hallazgo se supone que pudiera formar parte de las antiguas termas romanas que habían en esa zona, zona de influencia política y económica de la época. Como sabemos, Itálica se funda para acoger a los veteranos soldados de la II Guerra Púnica, siendo considerada el área residencial a diferencia de Híspalis que era el conglomerado mercantil por su cercanía al antiguo cauce del río Guadalquivir. Conocidos por todos es la habilidad de los antiguos romanos, considerados los arquitectos del agua, para la construcción de acueductos que condujeran el agua hasta la ciudad y su posterior evacuación por el entramado de su alcantarillado, conformando en su conjunto un laberinto de galerías y salas de grandes dimensiones. Estos pasadizos siempre han sido objeto de leyendas urbanas, no sólo los de Abades sino los restantes que existen dentro de ese perímetro que va de la Alfalfa a la Judería, todos ellos comunicados entre sí aunque desgraciadamente se ven cortados algunos de ellos por las sucesivas obras realizadas en la cimentación de los nuevos edificios. Vestigios de lo dicho se han podido ver en los bajos del antiguo cine Pathé, en los que se observaba que hubo cierta actividad portuaria. Pero, ¿que nos queda de esa floreciente época romana?, tan solo las columnas de la calle Mármoles, el resto se encuentra en el subsuelo, hoy podríamos ver algo, si las medidas adoptadas para su protección nos lo permitieran, en la plaza de la Pescadería, en la que aparecieron sendas cisternas romanas, en el Patio de Banderas con las recientes excavaciones llevadas a cabo o en los bajos de la plaza de la Encarnación, el Antiquarium, en los que se pueden ver los restos de un antiguo grupo de casas, eso sí, cuando lo vuelvan a abrir cumpliendo todas las medidas de seguridad. En definitiva, el doctor Serrera con su oratoria pausada, nos ha brindado una auténtica lección magistral sobre esta Sevilla oculta a los ojos de los sevillanos, permitiéndonos conocer esa infraestructura romana tan importante e interesante. De nuevo nuestro agradecimiento por su desinteresada y puntual colaboración con el Curso de Temas Sevillanos.